Entre los diversos apelativos que refieren al siglo XX los historiadores suelen denominarlo la centuria de los nacionalismos. Sin embargo la indagación sobre las consecuencias estéticas de estos movimientos ha quedado relegada. La presente comunicación describe la promesa estética de Ricardo Rojas, sus antecedentes y sus proyecciones, recogiendo las implicancias particulares del campo cultural de la denominada generación del Centenario. Al final se pregunta si cabe una aproximación analítica hacia las estética euríndica bajo las orientaciones de la crítica política o la historia social representada en la definición de nacionalismo cultural. Sobre todo si se toma como punto de discusión que la mirada estética desborda los límites de los dogmas políticos o sociológicos. A través del análisis de la estética euríndica pergeniada por Rojas se propone un recorrido que intenta reconstruir una experiencia nacionalista.