A lo largo de los años 60, el grabado argentino registra una visible renovación de sus proyectos y estrategias de circulación y reconocimiento. En paralelo al desarrollo de diversos emprendimientos institucionales, nuevas poéticas y planteos iconográficos, redefinen las prácticas y representaciones del "nuevo grabado". En este marco, los medios de comunicación y las tecnologías de la industria gráfica se proponen como un espacio abierto a múltiples exploraciones técnicas e iconográficas. Las nuevas obras asisten a sucesivos cruces e intercambios con medios, tecnologías y discursos del llamado "paisaje de las comunicaciones". La apropiación y manipulación de imágenes de la cultura de masas y la publicidad, el uso de nuevos materiales y procesos técnicos en la producción en serie de "múltiples" y ediciones gráficas a gran escala, y la investigación crítica de las condiciones de posibilidad de los discursos mediáticos en las propuestas del incipiente conceptualismo, traman y movilizan las variadas líneas de experimentación del grabado en el período. Repetición y serialidad, apropiación, fragmentación, intertextualidad o trasposición, fueron los principales dispositivos que emplearon los artistas. Proponemos, a partir del estudio de casos, la revisión y análisis de algunas de estas propuestas, en los años 1964-1974.