El Observatorio es uno de los tesoros fundacionales mejor resguardados de la ciudad. Sobre la pared de la galería Norte, se encuentran cuatro nichos, que junto con otros dos ubicados a los laterales del acceso Sur, están destinados a esculturas representativas de destacados astrónomos. Uno de los vestigios que se pueden apreciar acerca de este proyecto, son las placas que se encuentran emplazadas en cada nicho, con los nombres respectivos y fechas de nacimiento y muerte. Francisco Beuf fue quien inició las gestiones para llevar a la realidad este proyecto destinado a enriquecer el patrimonio edilicio, y seleccionó a Isaac Newton, Johannes Kepler, Pierre Simon La Place, Galileo Galilei, Francois Arago y Urbain Le Verrier, siendo este último reemplazado por Friedrich Bessel.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)