Doris Dörrie es una prolífica escritora de literatura. Sin embargo, es más conocida como cineasta, ya que se la considera la directora de cine más importante de Alemania. De hecho, desde el estreno de Hombres, hombres...(Männer…) en 1985, es la realizadora alemana más exitosa dentro y fuera del país. Suele decirse que el fuerte de Dörrie es retratar a la mujer y las relaciones de pareja heterosexuales y que justamente a esto se debe su éxito cinematográfico. En sus relatos literarios y cinematográficos, la pareja feliz aparece como un mito que nunca se concreta. Dörrie pareciera desmitificar el amor heterosexual idealizado y feliz, sus relaciones de pareja nunca redundan en la felicidad de los involucrados, sino que persiste cierta insatisfacción. Asimismo, en varias ocasiones se encarga de retratar figuras masculinas, hombres heterosexuales que se ven enfrentados a estereotipos de heteromasculinidades idealizadas a los que resulta imposible ajustarse y que generan, asimismo, restricciones respecto a las potencialidades personales.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)