El Turismo Rural Comunitario en los poblados más alejados de las grandes ciudades renueva la confianza de las personas involucradas, quienes tienen la posibilidad de hacer de su labor cotidiana un atractivo turístico que genere ingresos complementarios para una mejora de su calidad de vida y la de sus familias. Este despertar de las comunidades rurales comienza cuando se sienten orgullosos su cotidianeidad que es por sí misma un gran atractivo para cientos de personas que buscan, y cada vez más, la interacción con la gente local y el conocimiento de su cultura.