El termino biofouling (bio = biológico, fouling = ensuciamiento) es comúnmente utilizado internacionalmente para diferenciar a una comunidad compuesta por distintas especies de organismos acuáticos que colonizan y se desarrollan sobre sustratos duros artificiales, de aquella comunidad desarrollada también en el ambiente acuático, pero sobre sustratos duros naturales conocida como bentos de fondos duros. Ambas comunidades tienen una estrecha relación, ya que las especies componentes de esta última son las que dan origen al biofouling al colonizar y desarrollarse sobre sustratos duros artificiales.
Generalmente, el empleo del término biofouling implica situaciones donde el desarrollo de esta comunidad produce efectos negativos para el Hombre. Debido a ello, el conceptos de biofouling se ha basado durante muchos años en consideraciones prácticas mas que biológicas. Los estudios sobre el biofouling, desarrollado en ambientes portuarios de nuestro país, se han llevado a cabo en forma ininterrumpida durante los últimos treinta años. La experiencia obtenida de los mismos, permitió posteriormente iniciar estudios sobre esta comunidad desarrollada en circuitos de refrigeración industriales y mas precisamente en los sistemas de refrigeración de centrales termoeléctricas.
Durante los últimos años, la industria energética mundial ha acentuado las medidas tendientes a aumentar la confiabilidad y rendimiento de las centrales eléctricas principalmente a cinco factores: a) el alto costo de nuevas instalaciones, b) el aumento en el tamaño y la complejidad de los sistemas, c) la creciente vulnerabilidad de la sociedad a las interrupciones del suministro eléctrico, d) el alto costo de los combustibles y e) el costo que implica el reemplazo de la potencia comprometida en el mercado.