En esta presentación se intentará situar a partir de una viñera clínica, el estatuto particular del síntoma en los desfiladeros de la demanda escolar, privilegiando para ello las nociones de síntoma y transferencia para el psicoanálisis y su consistencia al interior del vínculo educativo. Para el análisis del presente material clínico, resultado de los encuentros con un niño de 8 años, nos orienta la idea de tiempo lógico en la cura. Tal como plantea J. Lacan (1996) en sus Escritos, en el texto “Acerca del sofisma lógico y la certidumbre anticipada”, en el cual nos advierte de la importancia de considerar en la cura en tres tiempos: instante de ver, momento de comprender y tiempo de concluir. Asimismo, tomaremos tres ejes fundamentales: 1- la articulación psicoanálisis y educación, 2- el estatuto particular del síntoma para el psicoanálisis a partir de la distinción entre síntoma y trastorno, y 3- la respuesta del sujeto mediante “su solución sintomática”, a partir de señalar los resortes teóricos que son los fundamentos de la práctica clínica del psicoanálisis con niños. Aquí nos orientan las siguientes preguntas ¿Qué fue aquello que hizo nudo en éste niño? ¿Cómo lograr un intento de orden y regulación?, ¿Qué lugar para el sujeto y para el analista, es decir cuál es el lugar de la transferencia?, ¿Qué intervención es posible, en virtud de la lógica que gobierna la estructura singular del caso en cuestión?.