Situada en la Colonia Hipódromo Condesa, en un barrio céntrico de la ciudad de México, en un terreno casi cuadrado rodeado de altas colindancias. Sobre una plataforma elevada 1,20 metros de la calle, el autor organiza los espacios alrededor de un patio, adoptando para cada elemento una forma distinta: una bóveda de cañón aloja el vestíbulo, la estancia y la biblioteca; un cubo para el taller de pintura; un prisma rectangular, colocado sobre una plataforma escalonada que esconde el garage, aloja las recámaras; y un cilindro que intercepta la bóveda contiene los servicios. Se trata de un cuidadoso ensamblaje de volúmenes distintos con ligeras rotaciones que exaltan las vistas de los espacios sobre el patio. Los materiales básicos usados en la obra son el concreto blanco aparente y la piedra «Hermosa» en los pisos interiores y el patio.