El propósito de esta ponencia es reflexionar en torno al compromiso que toda didáctica crítica evidencia con la transformación de la sociedad, dando cuenta del alcance de los sentidos teórico-prácticos en que se manifiesta.
En este encuadre nos interesa, al mismo tiempo, destacar la importancia de los estudios pedagógicos y didácticos para el mejoramiento de la formación docente, la enseñanza y el desarrollo del curriculum.
Nuestros planteos discurren en torno de dos sentidos fundantes de la didáctica crítica:
por un lado, el reconocimiento de las prácticas educativas como prácticas político-ideológicas y, por otro lado, la transformación de la práctica como núcleo identitario de las concepciones críticas.
Desde el encuadre teórico-epistemológico mencionado, nos proponemos analizar más específicamente algunos aspectos de la formación docente en ejercicio que puedan ser interpretados como propios de posicionamientos críticos. Entre ellos consideramos: ambiente, ciudadanía, autonomía y participación. La referencia empírica de dicho análisis, en la que podemos reconocer algunas tendencias y tensiones de interés, se conforma a partir de indagaciones realizadas en La Plata, Berisso y Ensenada, respecto del período 2005-2012.