Mi exposición tiene como objetivo señalar las distintas versiones que de la locura pueden leerse a partir de las fórmulas de la sexuación, presentadas por Lacan en la sesión VII, del seminario 20, Aún. A partir de dichas fórmulas Lacan ubica una bipartición que no se corresponde a los sexos biológicos, llamando lado hombre y lado mujer, al modo en que los seres hablantes se relacionan con los distintos goces, y esto deducido de las exigencias lógicas del discurso. Lo que pone a jugar en las fórmulas, es lo que ya había empezado a esbozar en el seminario sobre La lógica del fantasma: no hay relación sexual. Todo encuentro de los sexos implica un modo de fallar aquello que el amor, aún pide: de dos, hacer uno. La pregunta que me guió en la investigación fue la siguiente: ¿bajo qué condiciones, clínicamente, el modo de fallar la relación/proporción sexual merece el atributo de locura?