Todo lo que existe sobre la faz de la tierra es susceptible de ser visto como un lenguaje, con una sintaxis, una semántica, una pragmática y una gramática. La indumentaria, como lenguaje que es, se conforma como un tipo de lengua que al ser enunciada -vestida- no sólo dice cosas sino que las hace. Si pensamos en este modo de hacer con el vestido, nos estamos remitiendo infaliblemente a la filosofía del lenguaje ordinario de John L. Austin y a la teoría del género performativo de Judith Butler, sobre las cuales me propongo a trabajar en este paper.
Partiendo de estas teorías, podríamos entender la indumentaria como un lenguaje performativo. Un lenguaje que no sólo enuncia ciertas cosas, habla, comunica, presenta unos códigos, como ya lo explicaba Eco; sino que hace cosas con todo esto: actúa. La indumentaria performativiza nuestros cuerpos, los hace actuar y contar cosas sobre nuestra identidad, nuestro entorno y las formas en las que nos relacionamos con este y los demás.
Para observar los modos en los que la indumentaria performativiza nuestros cuerpos, me remitiré a obras de algunos artistas en las cuales se puede observar este fenómeno de una manera mas radical. A partir de sus diversas construcciones visuales a través de la indumentaria, me acercaré a las prácticas performativas que ejercemos sobre nuestros cuerpos en la vida diaria.