La experiencia se inicia en el año 2012 a partir de la necesidad de generar información local sobre la sustentabilidad de los sistemas productivos localizados en el Alto Valle del río Negro, y Valle inferior de los ríos Neuquén y Limay de la Norpatagonia Argentina. Se conformó un equipo de profesionales pertenecientes a diferentes disciplinas, con el objetivo de desarrollar herramientas de diagnóstico participativo compuestas por un conjunto de indicadores de sustentabilidad. La información generada podrá ser utilizada para la mejora de los sistemas de manejo; así como para orientar en el diseño de políticas públicas sectoriales. Según las diferentes etapas de trabajo se considera la participación de productores de la zona, así como de universidades, Institutos y otros grupos de investigación afines para poder incluir las capacidades y habilidades necesarias. Como lecciones aprendidas se destaca el proceso de construcción del equipo de trabajo transdisciplinario, los procesos de diálogo para la construcción de lenguaje común, y la construcción y validación de indicadores de forma participativa.