Un autómata finito es un modelo matemático abstracto compuesto por una cantidad finita de estados que tiene como objetivo recibir entradas y generar salidas este es el caso del autómata transformador, si el autómata sólo se limita a reconocer cadenas el mismo estará conformado por un alfabeto de entrada, un conjunto de estados finito, una función de transición, un estado inicial y un conjunto de estados finales.
Su funcionamiento se basa en una función de transición, que recibe a partir de un estado inicial una cadena de símbolos del alfabeto de entrada, va leyendo dicha cadena y el autómata se desplaza de un estado a otro, para finalmente detenerse en un estado de aceptación o de rechazo.
Dentro de los autómatas finitos, sean transformadores o reconocedores, se destacan el autómata finito determinista y el no determinista, la diferencia entre ambos radica en la función de transición, en la cual para el autómata determinista a cada estado le corresponde una única transición, es decir que para un estado determinado y ante un símbolo leído existe siempre una sola transición posible, mientras que en el autómata finito no determinista existen múltiples transiciones posibles desde un estado y un símbolo de entrada.