Este artículo analiza cómo los medios comunicacionales (como potenciales creadores de sentido) justifican la violencia hacia la mujer. En un contexto donde se ha avanzado con respecto a la problemática de los femicidios, las ideas conservadoras de los medios han superpuesto la violencia por sobre los derechos. La comunicación es algo serio y la elección de las palabras no son inocentes. A través de tres notas, veremos el peso de las palabras y el sentido que los medios intentan promulgar.