La historiografía chilena contemporánea es, como toda historiografía, objeto de tensiones y conflictos que notoriamente tienen que ver no sólo con posturas científicas sino, sobre todo, con lo que está en juego política y jurídicamente a través de la historia. En Chile ha predominado durante mucho tiempo la negación de los crímenes cometidos por y bajo la dictadura pinochetista; aún hoy, esta negación no ha sido completamente superada y las reivindicaciones de memoria, justicia y verdad blandidas por los organismos de Derechos Humanos siguen siendo maltratadas por las diversas acciones y declaraciones públicas que regularmente apoyan a los responsables de los crímenes cometidos entre 1973 y 1989.
Asimismo, la represión que sufren los organismos y militantes mapuches hoy día, como en el pasado, se inscribe en una larga historia dominada por el racismo, el ultra-liberalismo y un modelo represivo al servicio de las élites conservadoras. Podemos mencionar también la represion sufrida por el movimiento estudantil.
En esta ponencia haré hincapié en un grupo específico de víctimas de la dictadura militar, alrededor del cual se desarrolló mi trabajo de tesis: los hijos de retornados del exilio chileno.
Entre 1998 y 2003, durante mi doctorado de sociología, llevé a cabo una investigación cualitativa con un centenar de hijos de retornados, en la región Ile-de-France (alrededor de Paris) y en Santiago de Chile.