Existe una gran diversidad y polisemia en torno a la cuestión de la calidad y evaluación de la educación y; cada nueva versión o definición de dichos conceptos no sustituye enteramente a las anteriores sino que se observa cierta convivencia entre ellos. En este sentido nos proponemos identificar líneas de ruptura y de continuidad en relación a esta problemática que aún constituye un tema central de la agenda educativa en los contextos mencionados.
A modo de hipótesis, sostenemos que durante los años noventa prevaleció una concepción de la calidad vinculada a la medición de logros y resultados a escala nacional y asociada a la instalación de mecanismos de evaluación por parte del Estado en el marco de un sistema educativo descentralizado; mientras, que, en la actualidad, se la define como aquella que logra la democratización en el acceso y la apropiación del conocimiento de todas las personas. Sin embargo, la manera de concebir la evaluación de la calidad educativa de los años noventa pareciera continuar vigente.