Se presenta un análisis basado en la reflexión acerca de la posible influencia de los estigmas sociales sobre la construcción de las identidades juveniles, especialmente de las provenientes de grupos sociales carenciados, en el contexto de la escuela secundaria.
En el presente ensayo, la estigmatización es considerada como el producto de actitudes basadas en las apariencias. Los juicios profesorales fundamentados en aspectos tales como el porte, la vestimenta, los modales y el vocabulario de los jóvenes, en particular de aquellos provenientes de sectores vulnerables, podrían llegar a influir negativamente en la construcción de sus identidades, debido a que la identidad es una construcción social, sustentada desde el exterior a partir del reconocimiento del otro. En este contexto el otro es el docente, quien ocupa una posición de poder.
Influir de manera negativa en la construcción de la identidad de un individuo significa bajar su autoestima al punto de hacerlo sentir desacreditado y desacreditable, inducirlo a que se comporte conforme a lo que de él se espera y a que se parezca, cada vez más, a la imagen que se tiene de él. Esto contribuye a reproducir y a profundizar, en el contexto áulico, las estructuras sociales desiguales existentes.