Las prácticas de planificación participativa en Argentina ganan protagonismo desde principios de los años`90 hasta la actualidad, ligadas predominantemente al enfoque de la planificación estratégica. Si bien su generalización, constituyó un avance positivo en relación a las tradicionales prácticas centralizadas y tecnicistas, sus resultados a lo largo de más de veinte años en nuestro país, evidencian que la participación no ha sido condición de implementación de planes. La hipótesis del trabajo es que la participación no garantiza la implementación de un plan aunque presenta un fuerte potencial de implementación de propuestas sujeto a propósitos del plan y a los métodos de participación. El trabajo expone prácticas de planificación estratégica y territorial con un nivel comprobado de implementación, total o parcial, focalizando en la presencia o ausencia de los métodos participativos en relación a los resultados alcanzados. Se analizan “El Plan Director de Trenque Lauquen”, “El Plan de Ordenamiento y Desarrollo Urbano de Malvinas Argentinas” y El Plan Estratégico de Córdoba de 1994” comparando sus objetivos, propuestas concretadas y formas participativas aplicadas, para la elaboración de recomendaciones contextuales marco de la práctica de la planificación hasta métodos específicos de la participación social.