En los últimos años, el gobierno nacional ha implementado en la Región Metropolitana de Buenos Aires (RMBA) diferentes dispositivos de seguridad cuya orientación central es la intervención sobre territorios delimitados, caracterizados por ser zonas pobres con altos niveles de violencia y acumulación de privaciones y violaciones de derechos. Si bien, como se verá, existen antecedentes de estos despliegues desde principios de la década pasada, esta tendencia se acentuó luego de la creación del Ministerio de Seguridad de la Nación en diciembre de 2010. Lo que caracteriza a estos operativos es el despliegue de fuerzas federales como Gendarmería Nacional (GN) y Prefectura Naval Argentina (PNA), o de cuerpos nuevos como el Cuerpo Policial de Prevención Barrial (CPPB) de la Policía Federal Argentina (PFA), disponiendo modalidades de mayor presencia en barrios en los que el trabajo policial tradicional implica lógicas de irrupción, más vinculadas a la vigilancia y el amedrentamiento que a servicios de seguridad (allanamientos violentos, ausencia de patrullajes al interior de los barrios).