Mucho se habla del impacto de las nuevas generaciones en las relaciones laborales y de cómo se adaptan las organizaciones a estos nuevos desafíos. Fomentar el aprendizaje, trabajo en equipo, líderes transformacionales con nuevos roles, entrenamiento, educación continua, uso inteligente de nuevas tecnologías, emprendedorismo y reconversión del espacio, entre otras, son algunas de las características que deben tenerse en cuenta para la gestión organizacional de este nuevo siglo.