Es extraño que un texto de cuarenta y tres páginas, que, según el título, nos hablará sobre la idea del teatro, solo catorce páginas después de empezar, entra en el tema. Nos sorprende, una vez más, por afirmar que el teatro es más que la obra poética, que es más que los actores que la representan, es más que la escena en que fueron ejecutadas y más que el público que las presenció. Bien, el teatro sería todo esto y más. Teatro, como tantas, tal vez todas, las palabras del diccionario, tiene varias significaciones. Así, según el texto que estudiamos (a saber, “La idea del teatro” en la edición de Antonio Tordera), cada palabra tendría su sentido fuerte, primero. El sentido fuerte para teatro sería (o es) edificio. Teatro el nombre de un determinado edificio con ciertas características propias, por ejemplo, el teatro Argentino de La Plata, el de la av. 51, entre la calle 9 y la 10. Se preguntarán por qué les doy la dirección, pues bien, porque el teatro también es un sitio donde se va: los actores allí van a trabajar (a representar); el público allí va a divertirse (a presenciar el espectáculo).