Una de las tareas más dificil durante mi carrera en Letras fue y sigue siendo el hecho de compartir relaciones de conocimiento con lo literario desde adentro de la Facultad, como alumno o formando, y desde afuera en la relación vital que mantengo con la poesía como poeta hace ya muchos años y como profesor de literatura en el nivel secundario hace algunos pocos. La sensación de disecar y/o abstraer el sentido vital del quehacer poético al transformar ciertas prácticas en torno a la literatura en objeto de estudio me ha dejado las más de las veces con ideas o propuestas de estudio a medio elaborar y poco sistemáticas, entre la intuición, el entusiasmo y la postergación de la escritura, entre la escritura literaria, la profesión docente, la investigación y la vida. La necesidad de ahondar en las discusiones y propuestas de investigación sobre la enseñanza de la literatura, específicamente de la conformación del campo de los estudios líricos en la formación superior en Letras, me trae hasta acá a compartir algunas cuestiones sobre mi experiencia en lo que es la preparación de un primer plan de investigación.
(Párrafo extraído a modo de resumen)