El pensamiento de Ferdinand de Saussure produjo un efecto inmediatamente disruptivo en el campo de la crítica literaria, al introducir un tercer término (el orden simbólico) a la clásica dicotomía entre ciencias de la naturaleza y ciencias del espíritu. La crítica literaria, entonces, se vio forzada a repensar su posición en la distribución de los saberes. Produciéndose efectos tanto teóricos como institucionales.
La transmisión de Saussure al ámbito hispánico liga estrechamente y desde un comienzo a España y Argentina, pues será un filólogo español radicado en Argentina, quien primero traducirá y prologará el famoso Cours de Linguistique Générale de Saussure. Esta circunstancia permite observar y comparar las distintas dinámicas que este hecho produce en el seno de la crítica literaria española y argentina, observándose los reacomodamientos teóricos pero también las circunstancias institucionales que los facilitaron y obturaron. A partir de ese punto inicial, en la década de los cuarenta, seguir los avatares de Saussure y las consecuencias de su pensamiento, comparadamente, permite comprender mejor sus trayectorias divergentes posteriores, así como iluminar aspectos de cada uno de los escenarios estudiados que, observados por sí solos, sin que medie comparación, permanecen en buena medida ocultos.