Este trabajo surge como resultado de discusiones al interior del Laboratorio de Investigación Movimientos Sociales y Condiciones de Vida y el trabajo de campo cualitativo realizado en un barrio periférico de la ciudad de La Plata sobre las formas y contextos de sociabilidad de los perceptores de políticas sociales.
El proceso de desintegración del trabajo como organizador de las relaciones de los trabajadores, que se inició con el modelo económico de la dictadura pero que se profundizó en los 90, provocó un desplazamiento de la sociabilidad, desde el trabajo y la fábrica, hacia el barrio (Schettini y otros 2002; Schettini y otros 2004; Cortazzo y otros, 2000). La descomposición de los lazos que otorgaba el trabajo formal y la desarticulación en las protecciones sociales, fortaleció lazos de cooperación en el territorio (Murmis y Feldman, 2002). Apareció el barrio como un espacio fundamental de inscripción y afiliación de los sectores populares que reconstruyen su sociabilidad, a través de prácticas, representaciones y relaciones que se inscriben en lo territorial (Merklen, 2004). Esto fue lo que nos condujo a preguntarnos por esta forma de sociabilidad centrada en el barrio, entendiendo que hay una vivencia y experiencia cotidiana ligada a lo territorial.
En esta ponencia, no nos centraremos en el pasaje de la sociabilidad ligada al trabajo a otra centrada en lo comunitario, barrial. Reflexionaremos sobre la inscripción territorial de las mujeres y sus vínculos con las instituciones formales.