Sin tecnología no hay ciencia. El movimiento global por el hardware científico abierto (GOSH) plantea como punto de partida para imaginar un futuro diferente para la ciencia que los planos, protocolos y materiales de los instrumentos deben ser compartidos, a fin de que puedan replicarse. Esta activa y diversa comunidad nacida en 2016 ya ha realizado dos encuentros globales, cuenta con un Manifiesto y actualmente está en proceso de redacción de un Mapa de ruta para hacer el hardware científico abierto ubicuo para el 2025, mientras se prepara para un nuevo encuentro en 2018.