El presente trabajo tiene, en primer lugar, dos finalidades relacionadas: la catarsis personal-profesional y su encauzamiento en una producción académico- investigativa. Se pretende que este sea el comienzo de algunas reflexiones sobre la actual coyuntura que tiene demasiadas y lamentables similitudes con momentos históricos precedentes pero que, asimismo, muestra algunas características específicas. Un tercer objetivo es reactualizar una de las “funciones” del trabajo social como es el ejercicio del control social pero en dirección contraria a la institucionalizada: no ejercer el control social sobre la ciudadanía-pueblo sino sobre sus gobernantes. Entendiendo al control social como un medio de fortalecimiento y supervivencia del grupo de ciudadanos que nos sentimos excluidos en esta nueva modalidad estatal, en la cual el “cambio” en la dirección presentada en estos meses, constituye una desviación social. La manera que hemos encontrado en estos primeros meses del actual gobierno es la denuncia, en este marco se encuadran las descripciones, algunas comparaciones y posibles reflexiones del artículo. Se busca que este sea un medio informal de control social.
El objetivo central es desarticular los conceptos, medidas, acciones liberales-conservadoras que presenta la nueva gestión y que busca naturalizar y/o profundizar en la conciencia social. La batalla no es únicamente cultural pero es una de las más arduas y asimismo, posible de llevarse a cabo en la cotidianeidad de todos aquellos actores que resuenan con alternativas a las políticas actuales.