Propongo debatir en torno a la posibilidad de “otra institucionalización” política de los movimientos sociales, analizando sus procesos territoriales, desentramando la articulación que se estableció entre territorio y política, en el caso de la Organización Barrial Tupac Amaru y el partido de la Soberanía Popular (nucleado en el Frente Unidos y Organizados por la Soberanía Popular, FUyO)1 en la provincia de Jujuy y específicamente en la ciudad de San Salvador.
Para esto, considero necesario incorporar a la teoría de la acción colectiva y los movimientos sociales la perspectiva espacial de análisis de Henri Lefebvre para problematizar el territorio y su potencialidad política. A través de dicho “lente” territorial, daré paso al análisis de la articulación de la acción electoral en el caso bajo análisis.
La Organización Barrial Tupac Amaru de Argentina desplegó hasta el año 2015 un importante desarrollo territorial en la ciudad de San Salvador de Jujuy, a través fundamentalmente de la construcción de viviendas; pero también encarnó la reivindicación de diversos derechos: derecho a la salud, a la educación, al trabajo, a la recreación, a las sexualidades, etc. A partir del año 2011, se integró a la política formal con la creación del Partido por la Soberanía y el Frente Unidos y Organizados (FUyO), herramienta con la que se obtuvo un muy buen resultado electoral en las elecciones legislativas del año 2013, consiguiendo cuatro diputados provinciales y una decena de legisladores municipales en su primera experiencia de competencia electoral.
(Párrafo extraído a modo de resumen)