Con relación a la música vocal, el estudio de la pronunciación ha promovido el desarrollo de herramientas teóricas y analíticas que permiten comprender la realización de los sonidos del habla en la ejecución musical y vincular ambos campos expresivos, el del habla y el del canto. En italiano, francés y alemán, por ejemplo, las consonantes /b d g/ se pronuncian como oclusivas, consonantes breves y marcadas que involucran la retención de la corriente de aire por un cierre en la cavidad oral y su posterior liberación súbita. Debido a que estas lenguas tienen gran presencia en la música vocal del repertorio académico, las realizaciones oclusivas son ampliamente preferidas por el canon interpretativo y, por ello, se desalienta cualquier imprecisión o debilitamiento en su articulación. En español, no obstante, estas consonantes pueden reducir su grado de constricción y tensión articulatorias, lo que ocasiona la aparición de dos variantes consonánticas: oclusivas y aproximantes. Esto sugiere que, a pesar de que las oclusivas son privilegiadas por su presencia en el repertorio universal, el uso de aproximantes ‒propio del español hablado‒ podría ser reformulado como un recurso expresivo para la interpretación del canto lírico en este idioma. Sin embargo, si bien la pronunciación de las consonantes /b d g/ en español y sus variantes articulatorias han sido estudiadas en el habla, aún se desconocen las particularidades de esta variabilidad en el canto, en donde la pronunciación se halla combinada con otros recursos expresivos de índole musical (temporales, dinámicos, articulatorios, etc.).