Es ser humano es un ser-ahí (Dasein), con el desafío existencial de la inexorable imposibilidad que implica su finitud vital, pero que, al decir de Heidegger, lo instala ante la posibilidad de determinar su existencia, de construir y realizar un proyecto de vida. Para ello cuenta como ente corpóreo y situado, con la motricidad como intencionalidad operante que le posibilita el hacer y, consecuentemente, trascender a través de sus actos.
Su necesidad de trascender para superar la angustia existencial, lo ha llevado a buscar en el mito, la religión y finalmente en la ciencia el conocimiento que le posibilite proyectar y construir su deber ser humano. En este devenir, ha desarrollado la ciencia con base experimental-racional, que lo ha descorporalizado, fragmentando analíticamente en su estudio y tratamiento. Sin embargo, desde otra perspectiva paradigmática surgió la fenomenología para investigar en forma holística, hermenéutica, los fenómenos del ser del ser humano, interpretando a la motricidad como un fenómeno esencial.
Para la educación física se presenta el debate de seguir sosteniéndose desde el conocimiento de base empírico-racional o el surgido del enfoque hermenéutico-histórico, a fin de desarrollar un accionar que posibilite la comprensión profunda y trascendente del ser-en-sí-práxico.