Este escrito intenta reflexionar acerca del concepto de supervivencia, introducido por Aby Warburg. La historia del arte así entendida, se comprende como un relato no lineal, sino rizomático en el que distintos tiempos se conjugan. Desde esta lógica fragmentaria, se intentan pensar tres obras de Cecilia Vicuña, artista contemporánea chilena, para analizar si en ellas emergen restos del pasado ancestral precolombino, a modo de supervivencias.
Entendiendo que el proceso de conquista y colonización de Latinoamérica, trajo aparejado un corpus teórico de análisis y producción de obras, se intenta pensar el modelo de supervivencias como aporte a las teorías decoloniales. Se las presenta como gesto, adoptando una actitud de coexistencia, en la que los aportes para la reflexión no vengan a instalarse como dogma. De eso se trata la opción decolonial, pensar la posibilidad de varios mundos posibles y simultáneos.