Esta experiencia fue compartida en el espacio de un curso optativo, junto a alumnos de la Facultad de Ciencias Exactas, quienes atravesaban la etapa final y exitosa de su carrera. Así, el marco del trabajo responde a la implementación de una estrategia educativa en el ámbito universitario, entendiendo a la misma como un constructo multidimensional. Si bien en algunos tiempos el acento se marcaba en los aspectos cognitivos, se ha ido evolucionando hacia un enfoque integrador, en el que se incluyen también elementos afectivo-motivacionales.
La herramienta propuesta destaca y se centraliza en el rol protagónico del alumno, desde el inicio del encuentro pedagógico. En relación a esto y en consideración a sus intereses particulares, se subraya la participación libre pero guiada del educando (formativa), en los aportes realizados a la construcción conceptual del programa de la asignatura y consecuentemente en la incorporación de contenidos a través de su intervención. Asimismo y siempre cuidando el escenario del juego educativo, se motivó a compartir “el libreto”, a través de la construcción de un diálogo interactivo constante, sostenido en cada clase en el debate dinámico de papers, como de la presentación de temas puntuales a cargo de alumnos y en la evaluación conjunta de la gestión implementada en puntos cruciales del encuentro.