En el marco de la integración de la Informática y la programación en la educación general, se promueven - como una instancia para favorecer los propósitos y los contenidos de las propuestas en educación artística y sus niveles- acciones de capacitación y aprendizaje colaborativos, articulando los saberes disciplinares en Arte con el manejo de los recursos y contenidos digitales dentro del aula.
En este escenario, resulta necesario incluir la programación, la electrónica y la robótica en los espacios desde donde se construye conocimiento, integrando saberes emergentes en relación con los procesos de enseñanza y aprendizaje.
En consecuencia, ¿qué posición asume la escuela y los docentes ante las innovaciones de la cultura digital? ¿Cómo forjar un lugar fecundo para estas otras agencias de socialización? ¿Cómo cuestionar lo preestablecido y dar cabida a nuevos intereses e inquietudes? ¿Se trata tan solo de aprender a operar con nuevos recursos o el cambio es más profundo e impacta de igual manera? Entre las argumentaciones de la negación y de la posibilidad, este trabajo presenta un recorrido y una toma de decisiones acerca del modo en que las tecnologías instalan nuevas condiciones en la producción del conocimiento.