En este momento de la historia de la humanidad en que de la esperanza de vida al nacer es de 63 años a nivel mundial y de 73 años a nivel latinoamericano, contrastando fuertemente con los quinquenios 1950-1955-1960 en que esta era de 46 a 50 años de edad.
Se busca en esta reflexión, aportar con la forma de reflejar la situación de nuestros sistemas en el contexto latinoamericano, y como estos obedecen a proyectos políticos que solo han determinado una visión de hombre individual, competitivo desde la sociedad en su conjunto y tecnócratas desde el Estado. Una apuesta a las nuevas generaciones tiene que ver con un profesional actor social que integre miradas sociales, culturales, científicas y políticas, que de verdad le permitan incidir en decisiones relevantes y en su marco de actuación profesional.
En este sentido, es otra la realidad social actual, para la acción profesional de los Trabajadores Sociales y una tarea nueva para el mundo de la generación de ideas. Este es hoy el desafío para Trabajo Social y sus profesionales, que nos ubica en una no menor encrucijada, que no es otra que; si reiteramos mecánicamente viejas modalidades de intervención social o intentamos cuestionar el abordaje frente al contexto actual.
Este artículo se basa en una propuesta para la gestión con personas mayores en el ámbito territorial mirado desde la Planificación Situacional.