El dispositivo de Grupo abierto “Donde la música nos lleve” fue una experiencia de trabajo interdisciplinario llevada a cabo por Residentes de tres disciplinas que forman parte del PRIM de Florencio Varela en el CAPS “La Esmeralda” de dicha ciudad. Los encuentros se realizaron en la Parroquia “Nuestra señora de La Esperanza”; apostando a la Salud Comunitaria a partir de talleres de apreciación musical dirigidos a Adultos Mayores, considerando que esta es una de las población más vulnerables a nivel sanitario y más desprotegidas en cuanto a políticas sociales públicas, que funcionen en las instituciones de la zona.
Para desarrollar la experiencia de este espacio de trabajo y relatar cómo se va desandando el proceso de constitución del mismo, utilizaremos como aporte fundamental aquellos registros y crónicas sistematizadas a lo largo de la experiencia práctica, donde se capitalizan las acciones, reflexiones y análisis de lo realizado, intentando desprender los significados de acuerdo a la situación y con el atrevimiento de sostenerlos sobre la base de un marco teórico adecuado.
Vale remarcar que este dispositivo grupal es una construcción histórica, que se gesta desde la problematización y colectivización de la demanda junto a otros actores sociales del Centro de Salud; atravesados por todo un entramado de circunstancias políticas, sociales, económicas y culturales de trabajo territorial e institucional con la comunidad, que se cristaliza en la convocatoria a espacios de este tipo.
La música en los encuentros era la “excusa” para reunirnos y que los participantes puedan compartir un momento de conocimiento, distención y recreación social; apostando a la salud entendida desde su significado de completo estado de bienestar físico, psíquico y social. El objetivo era generar la integración del Adulto Mayor en la participación de actividades y afianzar vínculos con el resto de los integrantes; lo cual le permite un momento de suspensión en las actividades cotidianas realizadas al interior de su vivienda.