En el libro álbum lo visual y lo escrito son ambos portadores de significantes. Su diálogo se conjuga con el diseño y la edición, elaborando un objeto artístico que condensa sentidos, invitando al lector a apropiarse de él y buscar sus propias metáforas. En las siguientes palabras me propondré desarrollar brevemente el tema y lineamiento de mi tesis de grado para la obtención del título de Licenciada en Artes Plásticas con orientación a dibujo. Mi objetivo principal fue la realización de un libro álbum, definidos como aquellos en los que, por regla general, la historia escrita y el relato visual comparten un mismo grado de importancia. Ambos elementos deben relacionarse, aportando cada uno en igual medida (no quedando lo visual como acompañante del escrito,que suele ser lo que ocurre con los libros ilustrados). “La fuerza experimental de los procedimientos formales en los libros-álbum, desde el punto de vista plástico y literario (y en el diálogo entre ambos códigos), pero también en su diseño y construcción como objeto, genera la necesidad de una lectura que trascienda lo meramente temático y argumental; una lectura más ligada al juego con las formas y el lenguaje, más atenta al placer estético de la palabra y la imagen.” (Bajour y Carranza, 2002). Los libros álbum son aquellos en los que la narración pasa a contarse entre las palabras y las imágenes. Lo visual contiene información primordial para la comprensión de la historia, rol antes relevado exclusivamente a lo escrito. Las páginas del libro se suceden como escenas en las que deberemos sumergirnos a fin de escuchar de lo que hablan. La composición, los colores, el escrito, los personajes y sus expresiones serán nuestros guías. Esta nueva forma de contar las historias transgrede las convenciones de los libros. Muchas veces dejan en evidencia los artilugios con los que se construye la ficción, se resquebrajan las convenciones y estereotipos y obliga al lector a buscar nuevas herramientas con las que comprender lo que se le presenta. El juego pasa a ser entonces el motor con el cual el nuevo lector descubre la historia.