El objetivo fue diseñar un juguete que permita la construcción de un personaje que estimule la imaginación y que colabore en el desarrollo de habilidades emocionales en niñas y niños mayores de cinco años. La dinámica del juego consiste en la composición intuitiva de personajes de fantasía. Mediante la intuición representativa, el niño o la niña percibe la idea general, sin la necesidad de utilizar el recurso del razonamiento.