Las enfermedades parasitarias humanas entre otros muchos perjuicios matan, mutilan y producen discapacidades. En las distintas especies animales ocasionan enormes perjuicios en la salud e incontables pérdidas económicas, reducción de fertilidad, índice de crecimiento, producción de carne, de leche, calidad de la lana, postura de huevos etc. Mientras se hallan en los tejidos de sus hospedadores definitivos, según su tropismo, los parásitos se hallan protegidos. Condiciones ambientales externas pueden,sin embargo,influir sobre ellos. Ellos disponen de numerosas estrategias como mecanismo para su perpetuación como especie: cambian el comportamiento de su patrón, mimetizan antígenos del hospedador, se ubican en sitios inmunológicamente privilegiados, tienen elevado potencial biótico, formas de resistencia, etc. Los estadíos evolutivos que deben ser ingeridos por hospedadores intermediarios invertebrados para poder continuar con su evolución, heteroxenos, se ven influenciadas por factores externos que condicionan su presencia. Temperatura, humedad y luz solar entre otros, producen estímulos de eclosión, tropismos, actividad periódica y periodicidad.