En este trabajo analizamos las asimetrías territoriales del desarrollo y el impacto de la intervención pública sobre las mismas. Para ello, cuantificamos las brechas socioeconómicas entre provincias argentinas en los años 2000 y estudiamos la distribución de funciones y recursos entre jurisdicciones del Estado. Encontramos que las brechas de pobreza y necesidades básicas, educación, innovación, infraestructura de energía eléctrica, sistema financiero y seguridad pública aumentaron. Provincias y Nación gastaron e invirtieron más en la mayoría de las dimensiones, mientras que los municipios, receptores de grandes demandas ciudadanas, presentaron una baja relevancia relativa. Las capacidades tributarias provinciales fueron insuficientes para enfrentar sus responsabilidades, más notablemente en provincias de menor desarrollo relativo, y la distribución de fondos nacionales contribuyó a profundizar las asimetrías preexistentes. Lograr un impacto redistributivo de la intervención pública a nivel territorial implicaría aumentar los recursos disponibles para jurisdicciones sub-nacionales y compensar sus diferentes capacidades tributarias, lograr coherencia entre políticas de diferentes áreas y direccionar progresivamente las transferencias de recursos nacionales. Adicionalmente, como el desarrollo no depende únicamente de la política fiscal, debería enfatizarse en favorecer círculos virtuosos de crecimiento y desarrollo endógeno, creación de capacidades locales y generación de oportunidades genuinas de empleo para la población