Este trabajo es un primer avance de una investigación sobre la repercusión que tuvieron las rebeliones de Tupac Amaru en la Gobernación del Tucumán. Aquí la intervención del “bajo pueblo” tomó formas y direcciones bien diferentes a las peruanas y altoperuanas, ya que participaron, sobre todo, en las milicias encargadas de la represión. La población del Tucumán tenía una composición social distinta de la andina, con una proporción mucho menor de indígenas y con otro nivel, también inferior, de organización. Para eso se analiza la forma de participación, la “plebe” de la Gobernación del Tucumán en el ciclo de rebeliones altoperuanas, ya como milicianos o como rebeldes, discriminada por ciudades. Los milicianos muchas veces se alzaron y desobedecieron a sus líderes pero no por responder al llamado tupacamarista para restablecer el Incario, sino por causas propias que tenían que ver con formas desorganizadas de protesta frente a las Reformas Borbónicas, que procuraban modificar las prácticas locales y reformular la condición colonial de los territorios americanos.