Para los primates no humanos, la adopción de un infante se define como la asociación permanente entre una hembra en período de lactancia y un infante ajeno que es nutricionalmente dependiente. En esta asociación, la hembra expresa comportamientos de cuidado maternal, como amamantamiento, transporte y protección. En distintas especies de primates no humanos de África, Asia y el Neotrópico, se ha registrado la adopción de infantes, ya sea en ambientes naturales o en cautividad. En este caso, reportamos el primer registro de adopción en un grupo silvestre de monos aulladores negros y dorados (Alouatta caraya). Las hembras del género Alouatta paren a un solo infante por vez. La adopción se observó en Septiembre de 2008, en un grupo de 12 individuos (1 macho adulto, 3 hembras adultas, 2 hembras subadultas, 3 machos juveniles, 1 hembra juvenil y 2 infantes machos) que está siendo estudiado desde 2001 en Isla Brasilera (27° 18' S; 58° 38' O), Chaco, Argentina. Luego de la muerte de una hembra adulta con un infante dependiente, otra hembra adulta del grupo con infante dependiente adoptó al huérfano de similar edad (2 meses) que su hijo. Registramos la actividad de la hembra adoptante y de los dos infantes, además de la proximidad entre ellos, durante 2 días seguidos y obtuvimos 22.45hs de observación. Durante este período, la hembra adoptante expresó igual trato hacia ambos infantes; ella amamantó, transportó y protegió a su propio hijo y al infante adoptado. Este comportamiento se siguió manifestando en los meses posteriores a la adopción. Basado en observaciones comportamentales previas, es posible que la hembra adoptante y la hembra que murió hayan sido hija y madre respectivamente, por lo tanto este episodio podría ser un caso de selección por parentesco. La hembra adoptante estaría incrementando su eficacia biológica inclusiva, si el infante adoptado fuera su propio hermano. Por otro lado, si no existiera parentesco, la adopción podría ser un caso de altruismo recíproco, el infante adoptado al crecer podrá ser un aliado de su madre adoptiva. Este estudio sugiere que en primates no humanos, la adopción genera un vínculo afiliativo entre padres e hijos, que posiblemente no difiere del vínculo afiliativo entre padres e hijos biológicos.