El trabajo no se reduce a la suma de ciertas acciones físicas e intelectuales ejercidas a cambio de una retribución monetaria, sino que incluye concepciones y valoraciones sociales y morales, reformula y sirve para el ordenamiento de las relaciones interhumanas, es fuente de satisfacciones y/o frustraciones, condiciona las subjetividades e identidades, estructura el carácter y las narraciones de vida de los individuos, entre otras funciones. De todas éstas, aquí nos interesa centrarnos en la redefinición de las concepciones en torno del trabajo y del lugar que se le otorga a éste en la vida individual y las relaciones sociales contemporáneas a partir de los múltiples cambios y avatares que ha venido sufriendo en las últimas décadas y que ha originado procesos de inclusión y exclusión social multifacéticos. En relación con esto, la presente comunicación se aboca a examinar las transformaciones acaecidas en el mundo laboral contemporáneo, tomando como base elementos conceptuales de origen básicamente francés y poniéndolos en relación con el contexto dado en nuestro país, con el propósito de analizar determinadas concepciones teóricas, cuestiones fácticas y mecanismos de integración presentes en el ámbito del trabajo actual. Por ello, el escrito se estructura en dos partes: la primera y central destinada a cuestiones referidas a las concepciones y modos de organización e integración contemporáneos referidos al trabajo y la segunda que apunta a realizar algunos señalamientos respecto de las transformaciones en el contexto laboral de nuestro país en el siglo XX y a proponer un esbozo de principio conceptual para el abordaje teórico de estos fenómenos.