El constructo alexitimia fue desarrollado desde comienzos de los 70, de acuerdo con las observaciones clínicas de pacientes con enfermedades psicosomáticas clásicas (Nemiah, Freyberger and Sifneos, 1976; Nemiah and Sifneos, 1970). El constructo alexitimia fue formulado en consonancia con los siguientes rasgos salientes: (1) dificultad para identificar y expresar sentimientos; (2) dificultad para diferenciar entre sentimientos y el componente somático de los afectos; (3) un proceso imaginativo reducido, lo cual es evidenciado por un pobreza de fantasías; y (4) un estilo cognitivo orientado a lo externo y concreto. (Nemiah et al., 1976; Taylor et al., 1991). Con posterioridad (Taylor, Bagby y Parker ,1997), se definió al constructo como “un desorden de la regulación de los afectos”, que se encuentra en muchos cuadros de difícil tratamiento como las psicopatías, las adicciones y la vulnerabilidad al estrés.
Muchos estudios confirman, a su vez, que la alexitimia es un rasgo estable, presente en culturas diversas (Casullo y Páez, 2000; Parker, Bagby, Taylor, Endler y Schmitz, 1993) Existen diversos modelos explicativos, neurológicos, psicodinámicos y culturales, acerca del constructo alexitimia. Se han desarrollado, también, numerosos instrumentos para su medición. De entre éstos, la Alexithymia Toronto Scale, en su versión original de 26 ítems (TAS-26) y en su versión refinada de 20 ítems (TAS-20), han demostrado los mayores méritos psicométricos. La primera fue adaptada para nuestro país en 1990 (Casullo y Wiater), investigándose la confiabilidad y validez de tal adaptación, la validez de su puntaje total y de sus factores, y las variables que afectan la evaluación de la alexitimia, en el marco de un proyecto de investigación realizado por la Cátedra de Psicodiagnóstico (1997-1999, Sistema de Incentivos, UNLP).
A su vez, la TAS-20 ha demostrado, aún, mayor confiabilidad que su predecesora. Su validez factorial se ha probado en 18 lenguas y culturas distintas. Por nuestra parte, en la Cátedra de Psicodiagnóstico hemos realizamos la adaptación de la TAS-20 a nuestro país y desde 2007 venimos investigando acerca de su validez y puntos de corte.