En Química Agrícola, materia de primer año de la carrera de Ingeniería Agronómica de la UNCPBA, se incorporaron nuevas estrategias en las actividades de enseñanza-aprendizaje.
La modalidad de enseñanza consistía en clases expositivas, prácticas de problemas y actividades de laboratorio. Algunas motivaciones para introducir cambios fueron: baja asistencia de alumnos a las teorías, pobre participación en el laboratorio, mecanización en la resolución de problemas; resultando un aprendizaje deficiente. Además, hubo reducción de horas cátedra por la actualización del Plan de Estudios. Se propuso: captar el interés de los alumnos, propiciar una comunicación docente-alumno fluida, modificar la modalidad de trabajo para optimizar el aprendizaje y a la vez adecuar el programa a la carga horaria actual.
Los cambios realizados fueron: clases de integración de los fundamentos teóricos, problemas y explicación del trabajo de laboratorio, con la intervención de más de un docente y la participación activa de los alumnos; planteo de problemas reales, relacionados a las prácticas de laboratorio; empleo de material agronómico como objeto de análisis; visitas al Laboratorio de suelos... Las modificaciones realizadas favorecieron el interés y la participación de los alumnos, además optimizaron el aprendizaje.