La resolución de problemas favorece el desarrollo de capacidades de reflexión, crítica y valoración. Una característica observable en los estudiantes es que codifican rápidamente cualquier correlación entre los rasgos superficiales de un problema y el método utilizado para resolverlo y proceden a repetir ese método al detectar características similares en otros problemas. Ejemplo de ello es la tendencia a generalizar el uso del modelo proporcional. El modelo 3UV plantea desde diferentes aristas las competencias necesarias para utilizar correctamente las variables en la resolución de problemas. Este trabajo se planteó como objetivos estudiar cuáles son las dificultades que presentan los alumnos, de primer y segundo año de Ingeniería Agronómica de la Universidad Nacional de Córdoba, cuando se enfrentan al uso e interpretación de los parámetros y variables en la función lineal e identificar el reconocimiento, por parte de los estudiantes, de las situaciones que involucran modelos proporcionales y no-proporcionales. Para este fin se diseñó un problema de matemática aplicada con cuatro incisos, el cual se evaluó en primer y segundo año. Se observó un mejor desempeño en los estudiantes de segundo año respecto al manejo del modelo proporcional. En ambos grupos hubo mayores porcentajes de errores cuando en el problema se debía identificar el tipo de función y las variables involucradas