En este trabajo me interesa destacar algunos aspectos problemáticos en relación al modelo de crecimiento económico ilimitado que sostienen los países centrales como modelo de bienestar, en contraste al modelo de igualdad de ingresos y sostenibilidad fundamentado por Richard Wilkinson y Kate Pickett.
Algunos de estos aspectos problemáticos son los siguientes. La concepción de bienestar supuesta por el modelo de crecimiento económico ilimitado va de la mano con la promoción del consumismo a partir de la obsolescencia planificada y sentida de los objetos, la generación de nuevas “necesidades” y nuevos consumidores (niños de corta edad, etc.) y la alimentación del deseo de poseer bienes posicionales y renovarlos constantemente. Así, la calidad de vida se ve deteriorada por la continua competencia (tensión entre el estatus social objetivo y subjetivo) y a causa de la contaminación o degradación del medio ambiente (por la extracción de recursos desmedida, los elementos químicos utilizados en la fabricación y la generación de gran cantidad de desechos no biodegradables).
Wilkinson y Pickett, en cambio, consideran que el bienestar depende más de la igualdad de ingresos que del crecimiento económico. Si esto es así, un modo sustentable de reproducción de la sociedad, una mejor calidad de vida y un pensamiento ecológico serían todos aspectos de la sociedad que se reforzarían entre sí.