En la Región Pampeana viene imponiéndose cada vez con más fuerza, un modelo de organización del territorio rural ligado a la producción de bienes primarios orientados a la exportación, con baja diversificación, alta fragilidad ecológica y altos niveles de exclusión. Las consecuencias de la modernización productiva y del cambio de las estructuras agrarias, involucró la pérdida de empleos en las áreas rurales, el éxodo rural, la pérdida de calidad de vida y el aumento de la marginalidad.
En este contexto, de expansión del capital y modernización tecnológica en la producción agropecuaria y de deslocalización de los procesos técnicos y sociales, se reconoce, desde distintas experiencias de intervención, a la valorización de productos anclados localmente, como vectores sobre los que construir otro desarrollo.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)