El desarrollo territorial que sustentó el proyecto de renovación conceptual implicado en el mundo jesuítico-guarani, dio lugar a una interrelación particular entre el espacio físico y el espacio construido. Este mundo se ve materializado territorialmente por las Misiones: los conjuntos urbanos, el espacio circundante conformado por sus estanzuelas, estancias, puestos y capillas, con los caminos que interconectaban e interrelacionaban materializando una gran red, ya que las misiones estaban situadas como máximo, a una jornada de caminata entre ellas. Esbozaremos aquí algunas generalidades del rectángulo de piedra, representación más reveladora de ese mundo y ese tiempo. Es el tiempo del Barroco, el Absolutismo Monárquico y la Contrarreforma, de la organización centralizada como representación del poder. El caso Santos Mártires del Japón .Si tenemos en cuenta que Santos Mártires del Japón (1) es la misión ubicada más alta (295 m.s.n.m.) y que se halla en el sitio desde 1704, fecha en que llega la orden del rey de España -en el marco de una de las más importantes guerras que afectará directamente sobre las misiones- de invadir y recuperar la Colonia del Sacramento (Uruguay) que estaba en poder de la corona Lusitana, entenderemos su importancia en el control territorial del área. (1) 27°47'37" de latitud, 2|10'58" de longitud