Argentina en el período 2003-2013 registra un sostenido crecimiento económico, apoyado en una reindustrialización sustitutiva (en la medida de lo posible) complementada con la creación de empleo genuino, que tiene gran impacto en la reducción de la pobreza y mejora del conjunto de indicadores de reducción de la desigualdad social.
Lo que se complementa con un conjunto de medidas de desendeudamiento externo, nacionalización de empresas clave, e inversión en investigación y desarrollo.
Esta fase neo-keynesiana tiene un eje clave en el desarrollo de la obra pública, en tanto dinamizador económico y creador de empleo, lo que a su vez ha estado acompañado de un crecimiento sin igual del sector construcciones. Lo cual tanto se da por el extraordinario desarrollo de obras públicas, como por el de obras particulares de vivienda. Lo que ha impactado enormemente en la demanda de suelo, cuyos precios han tenido una evolución que va de cuatro a cinco veces en dólares. Lo cual opaca los evidentes logros económicos, sociales, y de las políticas positivas de redistribución del ingreso, generando una seria contradicción en materia de políticas urbanas.
La ponencia aborda dos situaciones: 1) La política de vivienda como factor de empleo y desarrollo económico; 2) Las tensiones en modificaciones del marco legal (Código Civil, Leyes urbanas y de vivienda, etc.); y para en una tercera parte ejemplificar un posible abordaje basado en el derecho a la ciudad y un avance en términos de justicia redistributiva (del espacio socialmente construido) En estas dimensiones aparece como denominador común, el límite de una concepción patrimonialista de la propiedad (y los derechos relacionados con una perspectiva civilista tradicional) lo cual afecta profundamente la realización de derechos colectivos y difusos como el derecho a la ciudad.
Esta ponencia busca indagar en lo que sin duda constituye un problema con la dimensión política (y de gestión local) en los procesos socioespaciales preguntándonos si ¿Sera que hay una contradicción fundamental en el “neodesarrollismo latinoamericano” respecto a la forma de relacionarse con el mercado del suelo y la vivienda? ¿Será que la propiedad, en tanto “intocable” impide regular los mercados? O… será que ¿hay una imposibilidad en alterar los poderes facticos en este campo?