La reflexión sobre las prácticas de evaluación de los aprendizajes y las concepciones acerca de ellas posibilita a los docentes la toma de consciencia sobre el tipo de aprendizajes promovidos así como omitidos, no sólo en referencia al recorte del contenido disciplinar que los profesores consideran relevantes, sino también cuestiones fundamentales vinculadas al dominio de determinado tipo de conocimientos - conceptos, habilidades, actitudes, competencias, etc.- y al tipo de demanda cognitiva involucrada - reproducción de información, aplicación de procedimientos, indagación y problematización, transferencia y resolución de problemas- (Biggs 1999, Pozo, 2009).
Tal toma de consciencia implica revisar las concepciones que los docentes sustentan acerca del conocimiento, el aprendizaje y la enseñanza, y que se constituyen como marcos referenciales epistemológicos y didácticos que orientan sus interpretaciones y juicios respecto de los aprendizajes de sus alumnos a la hora de evaluar. Coincidimos con Gimeno Sacristán (1994) que aquello que es considerado como éxito o fracaso en el desempeño académico depende en gran medida, de cómo se comprende y se aprecia el proceso y los resultados del aprendizaje. De allí que en este proyecto nos interese indagar no sólo las prácticas de evaluación sino también las concepciones que sustentan los docentes.