Durante esta última década las bibliotecas y los servicios de información documentales han realizado un enorme esfuerzo para poder seguir ocupando un papel destacado en La sociedad. Ellos, como organizaciones que gestionan información, han tenido que integrar em sus sistemas los cambios tecnológicos necesarios para adaptarse a los nuevos retos y estar lejos de desaparecer.
En el último tiempo el término web 2.0 ha comenzado a utilizarse para nombrar a una nueva generación de servicios web que tienen como base una mayor implicación y colaboración de los usuarios web y la aplicación de una serie de tecnologías que permiten lamayor implicación de los mismos.
Nuevos términos como booktubers, wikipedistas, ebookshan comenzado a aparecer siendo cada vez más comunes dentro del mundo de la información ya que permiten generar y compartir contenidos en una valía y forma diferenciada. Esta nueva realidad exige para las unidades de información la adopción de nuevas orientaciones estratégicas, el rediseño de los procesos técnicos y los flujos de información para encuadrar a las mismas dentro del universo de los servicios de información actuales.
Hoy, el usuario es el protagonista y pasa de ser un mero espectador y consumidor de lo que se le ofrece a convertirse en creador y generador de nuevos contenidos y servicios. Así se plantea un nuevo desafío adicional para las unidades de información: el manejo del intercambio de información entre pares. El peer to peer, donde las bibliotecas, archivos y centros documentales podrían tomar un rol destacado siendo escenarios de la generación de nuevos conocimientos.
¿Serán las bibliotecas y las diferentes unidades de información capaces de canalizar estas nuevas inquietudes? ¿Podrán asumir un nuevo rol y convertirse en un vehículo de generación de una “nueva colección” por, para y entre los usuarios? Una reflexión, en estas páginas.